jueves, 18 de noviembre de 2010

Con un corazón amputado y el alma llena de piedras.

Nosotros, descubriendo los secretos de la vida, la forma de hablar, de quedar bien y de sentir. La forma de que las cosas dejen de hacernos daño. Buscando alguien que nos sostenga el corazón entre mano y mano, porque no somos capaces de soportar la carga. Creyendo todavía en el amor eterno, porque eso nos han enseñado las películas de Disney, pero en las películas de Disney no nos dicen nada del dolor. 
Nosotros, con miedo a no saber que hay después, descubriendo que el tiempo es en el segundo en el que vives, y que eres lo que eres por todos los segundos acumulados. Con miedo a perder a personas que llevan contando ya demasiados segundos. Con miedo a no ser nunca amado, ni feliz.
Eso somos nosotros, lo más humano que pisa el planeta. Llenos de amor, de odio, de envidia y de egoísmo. Porque queremos la vida para nosotros, aprovechar cada segundo según nos place. Somos incapaces de vivir sin ser felices.

2 comentarios:

  1. Y, sin embargo, tampoco dejamos de pensar en el futuro. Yo creo que ahora el tiempo es como estar encerrados en un cubo de hielo que nos ahoga y no nos deja nadar.

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  2. Me parece notar melancolía y decepción en vuestras entradas. Tal vez esté equivocado, pero es como si se os hubieran abierto los ojos a una realidad en la que ya no dependéis de vuestros mayores y sintierais que esa realidad os supera. No olvidéis que la vida se construye segundo a segundo por cada uno de nosotros, lo que obtengáis de ella será en buena parte obra vuestra, no os dejéis amedrentar por las circunstancias y encarad la vida con optimismo ¡siempre tiene sorpresas que ofrecernos!

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